En la FEV hemos adaptado el método scout a nuestra realidad como entidad, a la realidad de nuestros grupos scouts ya la de nuestro entorno, para ofrecer una propuesta educativa lo más cercana a cada realidad.

Nuestros más de 65 grupos scouts desarrollan sus actividades adaptando la metodología scout a su realidad (barrio, ciudad o pueblo), y los recursos que tienen a su alcance, dando lugar a una pluralidad de actividades y formas de funcionamiento, que sin embargo buscan todas ellas lo mismo: contribuir al crecimiento como personas de los chavales que acuden a sus actividades.

La propuesta educativa que desarrolla la FEV está basada en unos valores desde los que el joven actúa, siente, reflexiona, vive… Una propuesta educativa desde y para la promoción de unos determinados valores, una propuesta educativa desde una forma de entender al ser humano ya la sociedad. La educación en unos valores concretos debe ser nuestra principal tarea dentro del escultismo, puesto que la educación en ellos posibilita, facilita y favorece enormemente la conquista de la autonomía personal, clave para el desarrollo de personalidades críticas, profundas y comprometidas con la acción social y la vida en sociedad.

Los elementos del escultismo son:

• Ley y Promesa: Se trata de una adhesión libre a una ley y una promesa que aportan una identidad y genuinidad a nuestro método. Se inscriben en el contexto más vasto de los principios fundamentales del escultismo y no pueden disociarse entre sí.
• Educación por la acción: Una educación activa es aquella en la que el joven es protagonista de su propia educación, responsabilizándose de su propio desarrollo y participando en todo el proceso educativo.
• Vida en pequeños grupos: El pequeño grupo tiene su origen en la forma natural de organizarse los jóvenes. Es un grupo primario, caracterizado por el contacto directo, afectivo (motivado por la relación) y espontáneo.
• Programas progresivos y atrayentes: “El método scout es progresivo, aspecto que se aplica a todas las áreas de desarrollo de la persona, siendo los niños y jóvenes quienes proponen las actividades según sus distintos centros de interés siendo también atrayentes.
• Vida en la naturaleza: La naturaleza es el marco ideal para la realización de infinidad de actividades atractivas y adaptables a todas las edades ya todo tipo de jóvenes.
• Marco simbólico: Un marco simbólico tiene como base la inclinación natural de los jóvenes para la imaginación, la aventura, la creatividad y la inventiva. Marca un estilo de vida que surge de una vivencia interna llena de símbolos y signos que lo expresan e identifican.
• Modelos del educador scout: Desde la propuesta educativa del programa de jóvenes entendemos que el educador juega un doble papel: referencia que anda en paralelo a los jóvenes y apoyo y acompañando en su crecimiento.