El concepto del injerto nos vino a la cabeza cuando buscábamos una imagen que representara y acercara nuestra propuesta sobre cómo debería funcionar la Federació d’Escoltisme Valencià

Por un lado, al realizar un análisis de su estructura, se aprecia que, cada una de las tres asociaciones que componen la federación, es única en su manera de trabajar desde y hacia el escultismo, con una realidad concreta y distinta a la de las otras dos asociaciones.

De modo que, si hacemos el esfuerzo de imaginar, cada una de las asociaciones como un árbol, con unas propiedades diferentes y que comparten entre ellos un pequeño huerto, además de apreciar sus virtudes individuales, nos daremos cuenta de que si intentan compartir recursos, como el agua de riego. el abono que les nutre, o incluso la luz del sol que les da energía, se encontrarán con dificultades obvias y algunas situaciones en las que, poniendo buena intención, se superpondrán en sus esfuerzos ya alguno de ellos le costará llegar a dar fruto.

Sin embargo, si nos propusimos, no sin el esfuerzo de todas las partes, injertar a las tres asociaciones porque, aún conservando sus propiedades únicas, funcionaran como un único ser vivo, en lugar de tres árboles independientes, conseguiríamos al mismo tiempo generar una serie de sinergias que beneficiarían a todas y sobre todo, sentarían unas bases de colaboración sobre las que asentar el futuro del escultismo en el territorio Valenciano.

No pecamos de ingenuidad y somos conscientes de que hay mucho trabajo por delante, y justamente por eso, nos comprometemos con esta idea en un proyecto, para que en los próximos tres años, la FEV se convierta en un elemento de apoyo, que vertebre l escultismo en las tres asociaciones y entre ellas; para ello tenemos claro que la federación, ni es, ni debe ser un pequeño grupo de trabajo, sino que debe nutrirse de la voluntad de mejora de todas las personas que, dentro de este movimiento, se comprometen a construir un mundo mejor.